"Saber luchar"

"Saber luchar"

Por: Alejandra Gómez Bernal (2002)

"Saber luchar no consiste en tener la 

intención de hacerlo, sino en hacer 

Lo que tenemos como intención."

En un juzgado, una mujer busca la posibilidad de iniciar los trámites de la patria potestad de su hijo. La persona que levanta el acta le informa que sería muy difícil luchar por ello y que los trámites implican muchos recursos monetarios. Al ser separada y de bajos recursos, se siente desamparada económicamente y se comienza a preguntar si debe seguir o no cono la luca. Por la gran presión de su situación, decide buscar el camino más ligero y pone en riesgo la felicidad plena de su hijo, y lo más importante, de ella misma. 

Tiempo después, una vez perdido el caso, su hijo se encuentra en graves problemas tanto físicos como mentales. Intentó buscar el amor que nunca pudo recibir de sus padres, pero no lo encontró; el joven refugió su dolor y sus penas en enemigos como el alcohol, la droga y más tarde en la violencia. 

¿Cómo es posible que podamos poner en duda nuestra felicidad y la de los seres a los que supuestamente amamos? ¿Cómo es posible que nos sea indiferente luchar para alcanzar nuestras metas? En el caso anterior se ve claramente reflejada la decisión por el camino fácil, que finalmente es el camino que resulta más amargo y el que perdura siempre en nuestras conciencias. 

Saber luchar es buscar la meta hasta el cansancio, es mantenernos constantes para no dejarnos vencer, es comprometernos con nosotros mismos para cumplir lo que aspiramos, lo que deseamos, lo que realmente sabemos que nos enorgullecerá.

La lucha se presenta segundo a segundo en nuestras vidas, cada paso que damos es siempre mirando hacia el frente, cada palabra que pronunciamos debe ir siempre llena de mensajes positivos, mensajes que nos motiven a mejorar, que nos lleven a levantarnos si la caída ha sido dura, mensajes que nos lleven a aumentar el coraje para defender lo nuestro, lo que nos pertenece. 

Algo que se presenta con gran facilidad en nuestra sociedad es que dejamos de hacer algo benéfico, siempre atenidos por el respeto humano, por el famosísimo "¿que dirán?". ¿Cómo podemos ser capaces de limitarnos por lo que la gente piense, por lo que la gente pueda llegar a decir?, ¿cómo podemos dejar de luchar por alcanzar la cima de nuestros ideales? PAra estas preguntas, no debe haber respuesta que se justifique, el dejar de luchar no nos beneficia, paraliza nuestro recorrido, paraliza nuestro trabajo y, muchas veces, nos impide llegar a donde pretendemos. 

Hay que saber luchar para tener derecho a cuestionarnos cuando algo no sale como esperamos, hay que saber luchar para poder conocer nuestros errores y cómo salir de ellos. Nunca dejemos de tener presente que no nos podemos reclamar algo por lo que no se ha luchado antes. 

Cuando uno siente dar todo lo posible, no se debe rendir, debe dar más de lo que piensa como posible. Cuando uno cree desfallecer, no debe buscar justificaciones, debe buscar otra manera de luchar, en la que probablemente desfallezca muchas veces más. Si realmente sabemos luchar, nunca debemos esperar el fracaso, sino esperar el cómo superar la caída, porque si verdaderamente sabemos luchar, debemos saber que una lucha nunca termina, sino que una buena lucha en la vida, siempre permanece. 

"Saber luchar no consiste en tener la 

intención de hacerlo, sino en hacer

lo que tenemos como intención."